Cuando llegué estaba oscuro
y brillaban algunas estrellas a lo lejos.
Sentí frío al respirar
y el aire se colaba suave en mis pulmones viejos.
Pero cuando amaneció caminé.
Salí y sentí el sol,
sobre mis pies el polvo
y en mi piel el calor.
Mis pasos me llevaron a tu casa.
Visité los jardines,
miré las murallas.
Me fijé en la chimenea,
también en las máscaras.
Pero sólo entendí
cuando me acerqué a la campana,
miré del mar la espuma
que de forma altanera en las rocas se estrellaba.
Toqué las nubes con un suspiro.
Abracé el mar con la mirada.
Me dormí bajo el sol radiante.
Arena, agua y sal respiraba.
Y mientras me alejaba con una sonrisa
entendí por qué elegiste aquella morada...
Las nubes en el cielo seguían el compás
de la danza que el viento hacía sobre el agua.
miércoles, septiembre 19, 2007
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2 comentarios:
Precioso todo lo que escribes, mis felicitaciones. Es mi primera entrada a tu blog y me gustaría que conocieras el mío. Yo escribo más bien cuentos cortos.
Nos vemos. Bsss.
Isla negra es espectacular, Neruda un gran Poeta , mucho criticaron su vida y sus actos , pero su obra sobrepaso todos los prejuicios
sigo leyendo
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